Lectura: buenos días, tristeza
Hablamos de: novelaAutor: Françoise Sagan
País: Francia
Trama: una jovencita vive despreocupada y feliz con su padre viudo, un hombre mujeriego y aventurero que sólo piensa en mujeres, fiestas y alcohol. La llegada de Anne, una mujer seria y formal, amenaza la vida libertina de esta pareja, por lo que una hija celosa y aferrada intentará a toda costa separarlos, sin pensar en las consecuencias.
[¿A QUÉ PÚBLICO SE LE RECOMIENDA ESTA LECTURA?]
Es una obra ligera que puede ser leída por adolescentes y adultos, ideal para comenzar con el hábito de lectura, pues es corta y sencilla.
¿Qué nos dice?
Nos recuerda que la juventud no se toma en serio los actos, pues sólo quiere placer y reconocimiento, y que el tiempo se detenga cuando se tiene más gozo.
Temas que trata: paternidad, verano, vida fácil, promiscuidad, alcoholismo, crisis de mediana edad, romance, primer amor, miedo, recelo, posesión, disciplina, deseo de aceptación, frustración, amor maduro, venganza, infidelidad, irresponsabilidad, muerte, tristeza, arrepentimiento.
Dificultad de lectura:bajo. Puede leerse en una sentada.
¿Qué se rescata?
A pesar de ser corta, da un bello mensaje de amor y arrepentimiento, como para recordar todos los errores que cometimos en la juventud, y que nos dejaron una enseñanza en la vida adulta.
¿Qué se pierde?
Nada, da un buen mensaje y cumple su ciclo.
¿Qué sensación me deja?
Tristeza por todas las veces que creemos que hacemos lo correcto, pero que en realidad es la inexperiencia la que toma el mando con increíble facilidad.
Personajes para recordar
Raymond: hombre maduro de 40 años, que lleva 15 años viudo y que apenas lleva dos años conviviendo con su hija, que estuvo en un internado. Adinerado, sexy y despreocupado, goza del favor de cuanta mujer joven desea, pues caen en las redes de su sonrisa y billetera. Vive una vida relajada y de lujos, entre fiestas y visitas a la playa, sin pensar más que en su comodidad diaria. Ama a su hija, aunque sólo conoce el consentimiento total como modo de relacionarse con ella. Se enamora de Anne sin creérsela, pues ella representa todo el sentar cabeza que a él le parece lejano.
Cécile: chica de 17 años que acaba de salir del internado y comparte con su padre una casita en la playa. Ama a su padre porque los dos comparten la pasión por las fiestas, el ocio y el despilfarro. No quiere pensar en estudios o trabajo, y le gusta besarse con Cyril sin compromiso. Anne la cuidó por un tiempo cuando su madre murió, pero le teme y la admira a la vez, causándole conflicto cómo la desprecia y a la vez ruega por su aceptación. Se siente intimidada ante su carácter y seguridad, y quiere separarla de su padre cuando se entera que piensan casarse, pues no se imagina la familia típica y aburrida en la que se convertirán. Se siente derrotada cada vez que nota que su padre baja la mirada y le dice a todo que sí, aunque ello signifique ponerse en contra de su hija. Planea alejarla de sus vidas, pero no se da cuenta del alcance de sus acciones.
Elsa: mujer pelirroja en sus veintes, bella y cálida, que es la novia en turno de Raymond cuando Anne aparece en la historia. Se quema en el sol y se vuelve un desastre, pero aguanta el ritmo despreocupado de padre e hija, y le gusta ser parte de su familia. Ha sido amante de varios hombres en el círculo social de Raymond, pero a él le gusta pensar que ahora es él quien la puede presumir. Sufre al darse cuenta que Anne le ha arrebatado la felicidad, pero planea una venganza con Cécile, trabajando tan bien en ella, que sabe que pronto tendrá de nuevo una oportunidad.
Anne: mujer madura que fue amiga de la madre de Cécile cuando vivía. Se encarga de su educación y cuidado por un tiempo, causándole miedo por sus continuas exigencias. Fina, refinada, seria, sin escándalos en su vida. Convence a Raymond de que casarse puede darles a los tres la estabilidad que necesitan, y se enamora sinceramente de ellos. Es exigente con Cécile, reprimiéndola constantemente. Siente celos de Elsa, pero no lo demuestra, pues ante todo es una dama. Se arrepiente de sus maltratos y trata de ser amorosa con su hijastra, pero sólo provoca que Cécile no sepa si temerle o admirarle, confundiendo más su relación. Su disciplina es causante de su peor pesadilla.
Cyril: jovencito playero que practica vela y conoce a Cécile en las vacaciones, enamorándose de ella con la inocencia del primer amor. Hace lo que sea por ella, incluso pretende pedir su mano. Es su primer amor y su primera experiencia sexual, y le ayuda a recuperar a Elsa, pues tampoco le gustan los maltratos de Anne.
Retacitos para el librero
Nos acostumbramos a los defectos de los demás cuando no nos creemos obligados a corregirlos.
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Al margen del placer físico y muy real que me procuraba el amor, experimentaba una especie de placer intelectual pensando en él. Las palabras «hacer el amor» poseen una seducción propia, muy verbal, abstrayéndolas de su sentido. El término «hacer», material y positivo, unido a esa abstracción poética de la palabra «amor», me fascinaba.
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Es curioso cómo se complace la fatalidad en elegir para encarnarla rostros indignos o mediocres.
Al margen del placer físico y muy real que me procuraba el amor, experimentaba una especie de placer intelectual pensando en él. Las palabras «hacer el amor» poseen una seducción propia, muy verbal, abstrayéndolas de su sentido. El término «hacer», material y positivo, unido a esa abstracción poética de la palabra «amor», me fascinaba.
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Es curioso cómo se complace la fatalidad en elegir para encarnarla rostros indignos o mediocres.
** Escenas Inolvidables **
Cuando lo leas, no te las pierdas.
- La primera vez de Cécile y Cyril- La fiesta donde Cécile pelea con una de las ardidas esposas de un amigo de su padre
- Cécile encerrada en su cuarto hiriéndose el hombro
- El arrepentimiento de las escenas finales
- Cécile encerrada en su cuarto hiriéndose el hombro
- El arrepentimiento de las escenas finales
Ficha técnica.
Año: 1954
Género: ficción / romance
¿Real o irreal?: irreal
Escribe...
Françoise Quoirez nació en Francia el 21 de junio de 1935. A los 20 años, fue reportera de la revista Elle, viajando por todo el país para hablar de los distintos distritos franceses. Cada reportaje empezaba con la frase "buenos días", haciéndose su firma personal. Había publicado Buenos días, tristeza, con ayuda de sus padres acaudalados, a los 18 años y bajo seudónimo.
En 1995 fue condenada a un año de prisión con indulto por consumo excesivo de alcohol y cocaína. También se le condenó con indulto por un fraude fiscal.
A los 22 años sufre un accidente automovilístico que daña su cerebro. A los 50, enferma de gravedad de las vías respiratorias.
Fue amiga cercana del presidente François Mitterrand. Se casó dos veces; la primera, con el francés Guy Schoeller, que era veinte años mayor que ella y de quien se divorció porque "no tenían tiempo para estar juntos". Su segundo esposo, Robert Westhoff, fue el padre de su hijo Denis.
Murió por una embolia pulmonar en 2004, a los 69 años.
También fue conocida como dramaturga, directora de cine y biógrafa. Fue ganadora del Premio Príncipe Pedro Prix du Brigadier.
En 1995 fue condenada a un año de prisión con indulto por consumo excesivo de alcohol y cocaína. También se le condenó con indulto por un fraude fiscal.
A los 22 años sufre un accidente automovilístico que daña su cerebro. A los 50, enferma de gravedad de las vías respiratorias.
Fue amiga cercana del presidente François Mitterrand. Se casó dos veces; la primera, con el francés Guy Schoeller, que era veinte años mayor que ella y de quien se divorció porque "no tenían tiempo para estar juntos". Su segundo esposo, Robert Westhoff, fue el padre de su hijo Denis.
Murió por una embolia pulmonar en 2004, a los 69 años.
También fue conocida como dramaturga, directora de cine y biógrafa. Fue ganadora del Premio Príncipe Pedro Prix du Brigadier.
Obra representativa:
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